Paralela a la propia creación arquitectónica y a las
historias de lo creado el hombre a lo largo de los siglos, sea como
interpretación, reflexión, sistematización o como conjunto de principios que
pudiera orientarla, hay toda una historia de la teoría de la arquitectura cuya existencia no podemos
ignorar. Desde Vitrubio hasta Christopher Alexander, una larga lista de
Manuales, Tratados o Diccionarios dan cuenta del enorme esfuerzo humano
dedicado a interpretar o valorar lo hecho por el propio hombre. Una buena
miscelánea de esa lista la podemos encontrar en el libro de Hanno-Walter Kruft,
editado en dos volúmenes por Alianza Forma con el elemental pero ajustado
título de “Historia de la
Teoría de Arquitectura.
Aparte de conocer los libros y los autores de teoría, bueno
es también preguntarse por el origen y razón de la misma: ¿quiénes son los que
escriben teoría? ¿son principios previos a la creación o justificaciones
posteriores a la propia obra? ¿qué papel han jugado los historiadores en la
creación de teoría con su manía (o su método) de poner etiquetas a las cosas?
Pero además de la creación arquitectónica y de la creación
de teoría de la arquitectura, lo que vemos ejercer en clase al profesor, o lo
que vemos que se escribe desde los medios de comunicación, es otra cosa algo
distinta que desde hace más de un siglo se viene denominando “crítica”. ¿Qué es
la crítica y qué papel ejerce sobre la creación o sobre la historia? ¿Ha habido
intentos de sistematizar la crítica o de establecer sus herramientas? Algo de
bibliografía hay (y mi Manual de Crítica de la Arquitectura , ed
Biblioteca Nueva, es mi modesta contribución a ello) pero sigue sin estar claro
el papel mismo de la crítica y de ahí su mala prensa. Hay quien ve en la crítica
algo parecido a un juicio o valoración, en el mejor de los casos basado en los
principios o normas de la teoría, pero en el peor de los casos, como resarcimiento
o venganza de los no creadores sobre los creadores.
Por mi parte, sin embargo, creo haber dejado claro en el
Manual mencionado, que la crítica es también una creación, y en tal sentido una
poética y no sólo un juicio; que la crítica es parte del propio proceso
creativo, acaso un reverso o un receso, pero parte del proceso al fin y al
cabo, y que por lo tanto debe aprenderse y ejercerse en paralelo con la
creación.